El acelerado desarrollo tecnológico introdujo nuevas soluciones legales para mejorar la accesibilidad, la comprensión y la eficacia de la justicia. Estas soluciones tuvieron origen en el Legal Design o diseño legal que se trata de una fusión entre la perspectiva legal y la metodología Design Thinking (pensamiento de diseño) para mejorar los procesos y los consecuentes resultados. El propósito del diseño legal es incentivar la innovación en el sector jurídico a través del diseño de servicios, procesos y entornos de fácil comprensión e intuitivos.
El Design Thinking mediante la innovación y creatividad ofrece una variedad de soluciones para los problemas, entiende las necesidades de un usuario, y desde diferentes perspectivas interdisciplinarias busca hasta encontrar la solución más adecuada para la resolución de problemas.
La metodología está conformada por las siguientes etapas: empatizar, definir, idear, prototipar y evaluar.
Se pasa a describir la importancia de cada una de estas fases:
- Empatizar: la importancia de esta fase es que se centra en comprender las necesidades y emociones de los usuarios o clientes finales. Se interactúa con las emociones del usuario final, para tener una perspectiva directa sobre el problema u oportunidad que se quiere abordar y como el usuario lo percibe de acuerdo con sus sentimientos y emociones.
- Definir: la importancia de esta etapa es definir claramente el problema, con el soporte de la información obtenida en la fase de empatía. Un enunciado claro y conciso del problema guía el proceso de diseño y asegura que todos los miembros del equipo tengan claridad y un entendimiento común de lo que se debe resolver.
- Idear: la importancia de esta fase es que se generan una amplia variedad de ideas y soluciones potencialmente implementables, fomentando la creatividad y la colaboración, permitiendo que los equipos piensen fuera de lo convencional, generando nuevos supuestos y posibilidades de romper paradigmas.
- Prototipar: la importancia de la creación de prototipos es que permite a los equipos materializar las soluciones seleccionadas, en representaciones tangibles, permitiendo explorar y experimentar; facilitando la identificación de problemas, riesgos y oportunidades de mejora antes de invertir recursos significativos en el desarrollo de un producto final.
- Evaluar: la importancia de la fase es que se evalúan los prototipos con usuarios reales para obtener retroalimentación, la cual es decisiva para entender cómo los usuarios interactúan con la solución y qué cambios o ajustes son necesarios antes de llegar al mercado.
Cada etapa se ejecuta hasta lograr el diseño final de la solución. Primero, se identifica cuál es el problema o necesidad del usuario. Luego, se establece un punto de vista sobre cómo abordar ese problema o necesidad. Acto seguido, se realiza una lluvia de ideas para proponer soluciones. Enseguida, se hace un prototipo de un primer diseño de la solución. Finalmente, se prueba la solución con el usuario.
La importancia de agotar cada fase es que se sigue una metodología para implementar innovaciones que responden a necesidades u oportunidades que directamente se relacionan con el sentimiento del ser humano, como usuario de un servicio.
El Legal Design busca resolver los problemas legales utilizando la tecnología, el derecho y el diseño, proponiendo soluciones innovadoras. Esa trilogía se nutre de múltiples herramientas que impactan el ámbito jurídico a través del diseño de soluciones centradas en el usuario, intuitivas y de fácil comprensión.
Uno de los beneficios que ofrece esta metodología es el diseño de normas jurídicas, providencias judiciales, contratos, escrituras públicas, software, entre otros, con un contenido claro, conciso, de fácil lectura y entendimiento. Así mismo, reformula el diseño de las plataformas digitales para que sean intuitivas y propone la organización de procesos legales, entre otros alcances.
En conclusión, el Legal Design es una nueva perspectiva del ejercicio y práctica del derecho que irrumpió de forma abrupta el mundo jurídico para adaptarlo a las nuevas necesidades que surgieron con el acelerado desarrollo tecnológico.
El diseño legal invita a atreverse a innovar en una industria legal que se había mantenido tradicional y distante, pero que ahora con el avance rápido de la tecnología va tornándose flexible y abierta a las nuevas soluciones centradas en la experiencia del usuario.
Si es de su interés, puede consultar las referencias bibliográficas de este ensayo:
- Mari, S. s.f. Las 5 etapas del Design Thinking y sus técnicas. Intive. https://intive.com/es/careers/las-5-etapas-del-design-thinking-y-sus-tecnicas
- Ortiz, J. (4 de mayo de 2023). El Legal Design Thinking: una cuestión de transformar. Universidad Externado. https://dernegocios.uexternado.edu.co/negociacion/el-legal-design-thinking-una-cuestion-de-transformar/
- Sierra, Y. (22 de febrero de 2023). Legal design thinking: qué es, cursos, ejemplos y contrato. Lemontech. https://blog.lemontech.com/legal-design-que-es-y-como-cambiara-la-profesion/